De qué va esta película? (Quién soy?)

 

 

El detrás de cámara

 

Hace 30 años y unos meses yo nacía en Argentina y mi mamá me puso el nombre de Macarena. Un poco porque le gustaba el nombre, otro poco por su amor a España, país en el que ha vivido (Quien iba a decir que unos años después, sería también el nombre de una de las canciones más famosas del mundo y yo pasaría gran parte de mis días escuchando a la gente cantarme). Y así, como mis abuelos, mis papás y muchos Argentinos que van y vienen, yo hace 3 años decidí que tampoco podía quedarme en un sólo lugar.

Estudié dirección cinematográfica, que fue el eje fundamental de un amor más grande, las artes. Coqueteé con el teatro y la música, estudié piano y bandoneon. Y en el tiempo que viví en Argentina trabajé como editora audiovisual y fotografa.

Sin embargo había un sueño aun más grande que vaya a saber cómo, por qué, cuándo y dónde se ha gestado…

 

La preproducción del viaje

 

Cuando era chica quería ser escritora y escribí cuentos sobre el fondo del mar que escuchaba a través de un caracol. Me inventé una editorial casera que se llamaba “Keep Smiling” y con cartulinas le hice la tapa a mis cuentos.

Me encantaba el día que teníamos geografía en la escuela y la profesora nos pedía que llevemos mapas. Amaba los mapas, dibujarlos, marcar continentes y océanos, aprender que otras ciudades del mundo estaban a la misma latitud que Buenos Aires y todas las capitales de América. Y amo los mapas cada día más.

Por la misma epoca ya empezaba a hacer mis primeros viajes sola. En mi escuela se organizaban campamentos por Argentina. El mejor fue uno de los últimos que fuimos a Puerto Madryn y buceé por primera vez y conocí aquellas historias del mar que escuchaba desde chica a través del caracol.

Ese mismo año, o el siguiente, conocí dos neozelandeses que me invitaron a ir a visitarlos a su país y pasar unos meses alla. Un sueño que aun está pendiente. Pero fue el sueño clave.

Y yo crecía y conmigo, los viajes. Viajé sola, de novia, con amigas, con amigos, con familia.

Siempre con mi cámara de fotos.

Viajé mucho por Argentina y los pises vecinos. Chile, Uruguay, Bolivia, Perú, Brasil.

Viajar era lo que más me definía, lo que más me hacía estar viva. Por que? De donde viene? De los campamentos? De los mapas de las clases de geografía? No lo sé. Sólo sabía que ya no me alcanzaba con esperar a las vacaciones para poder viajar. El deseo de alguna vez viajar a Nueva Zelanda siempre estaba presente, pero por H o por B, quedaba una vez más para el año siguiente, prometiendo que entonces si, a fin de ese año, me iba a Ocenía.

Y un buen día, un fin de año brindando, en esos momentos en que una hace evaluaciones del año que se va y proyectos del año que comienza, me lo prometí a mi misma. Este año sí, este año voy a viajar. Viajar en serio. Nada de esperar hasta las vacaciones. Este año voy a viajar cuanto pueda y a fin de año me voy a Nueva Zelanda. «Es más!”, pensé, “Me voy a cortar el pelo bien corto y no vuelvo hasta por lo menos tenerlo como ahora”. Y me lo corté, y lo tenía muy largo. Lo primero sucedió. Los viajes empezaron a aparecer constantemente y casi como un acto de magia viajaba cada 2 meses a un nuevo destino. Lo segundo aun está por suceder. No conozco Nueva Zelanda, pero mucho antes de ese fin de año, en Agosto de 2014, salía de Argentina, cumpliendo mi gran sueño, viajar, vivir viajando, vivir en nuevos lugares, nuevas experiencias, nuevas sensaciones, nuevas culturas, y una nueva Macarena.

 

Producción: el viaje

 

Desde Agosto 2014 viajo muy, muy lento. Decidí radicarme en diferentes países y de ahi viajar. Viví en Colombia, lugar que amo y siento mi segunda casa, y en Amsterdam. Donde aun resido y desde acá me muevo.

Me gusta este tipo de viaje instalada en un lugar porque me da la posibilidad de conocer ese pueblo en profundidad y aun así, seguir viajando.

Viajé por Sudamerica, Europa y Africa, siempre con mi cámara.

Y en 2015 decidí plasmar todo esto, ponerle un nombre, compartirlo y contagiar la magia del viaje, del mundo entero. Y así nació Mambo Viajero. Primero en redes sociales con fotos y algunas palabras descriptivas. Con el tiempo esas palabras se convirtieron en historias y las fotos comenzaron tener vida. La pequeña escritora de mi infancia también viaja conmigo y cuenta los relatos, las experiencias, las sensaciones que dejó el camino. A veces la belleza es tan grande que se queda sin palabras y los relatos audiovisuales hacen el resto. Si, a veces una imagen vale más que mil palabras.

 

Postproducción: lo que será

 

Que vendrá no me animo a decir, porque la vida me ha llevado de sorpresa en sorpresa.

Tanto Oceanía como Asia siguen siendo parte de un gran sueño que está por venir.

Sólo se que el mundo es muy grande, la vida es corta, yo viajo lento y cada vez me gusta más.

Con mi pelo hago trampa, de vez en cuando me lo corto así nunca llega al largo que tenía antes del viaje ;).

Y luego de 15 años, Nueva Zelanda y mis amigos aun siguen esperándome. Cuando será y que pasará en el medio será la mágica sorpresa que hará el camino…