- Gante, la gran ciudad medieval
- Londres, capital del mundo
- ¡Feliz 2017!
- Dublin, mi preferida
- Berlin es sexy
- Carnaval en los Países Bajos! (o la alegría es sólo brasileña…)
- Portugal, la vieja dama
- San Patricio en Dublin
- Islandia, un viaje a la luna
- Copenhague, la prima de Amsterdam
- 3 años en Amsterdam…
Ya ha pasado poco más de un mes de este enorme cambio que hice en mi vida. Un mes que dio que hablar y que compartiré más tarde. Pero cuando estaba dando ese gran salto, en el avión, viendo alejarse Amsterdam bajo mis pies, escribía esto mientras miraba las fotos de estos 3 años en la capital neerlandesa. Lo comparto, así crudo, tal y como lo escribí, lo más desnudo y real posible. Lo que salió naturalmente aquel 24 de Abril histórico en mi vida. Las fotos no son grandes fotos, sino fotos reales, espontáneas, rápidas. Más que fotos son recuerdos de la vida cotidiana…
«Es inabarcable en palabras lo que siento en este momento. Estoy en el ojo del huracán, en el punto exacto de gran cambio. Me encantan los cambios y los busco constantemente, pero cada vez que estoy en la punta del trampolín, a punto de dar el salto al vacío, como ahora, me vuelvo un manojo de emociones, de nervios, de miedo, de felicidad.
Hace 3 años que vivo en Amsterdam. 3 años muy intensos. 3 años de un constante amor-odio. 3 años que ni ya pasados me creo que son 3 años. Esta ciudad desafió mis estados de ánimo, mis sentimientos, mi fuerza de voluntad, mi fortaleza y mis principios, pero también supo retribuirme. Al fin y al cabo fueron 3 años llenos de sueños cumplidos. De tantos viajes como nunca antes. Pataleé mucho, pero hoy me voy agradecida. Me despide con unos días de sol y calor nunca vistos en esta época del año. Uno de esos días en que Amsterdam termina de volverse perfecta. Discutimos mucho pero hoy estamos dándonos un gran abrazo afectuoso de despedida.
Y lo que viene es aun más especial. Después de casi 4 años fuera de Argentina este es el primer lugar que yo elijo para vivir. Buscaba sol, calor, calor humano, tranquilidad, cultura musical y ahí apareció, quien siempre resonó, quien me enamoró cuando la conocí, hoy se torna real. Hace 5 meses me propuse vivir en esta maravillosa isla y hoy puedo decir que me voy a vivir a Cuba, porque nos elegimos mutuamente. Y ambas estamos atravesando cambios muy grandes. Estaremos juntas en estos cambios.. Me intriga mucho saber como será mi vida allá. Pero no espero nada y me dejo caer en un mar caribeño de sorpresas…»
Hasta siempre Amsterdam.